20 ago 2011

bidu, nosotros y la maroma global


 (Amado Boudou ministro de economia)

El Gobierno está buscando medidas que le permitan al país continuar con la senda de crecimiento. Estamos atentos para que no nos fabriquen problemas desde afuera.
Es imprescindible profundizar el proceso de industrialización, porque de esa manera podremos crear más trabajo para los argentinos
Los miembros europeos del G-20 plantean regular los precios de los commodities y, en consecuencia, limitar los ingresos de los países en desarrollo. En cambio, el gobierno argentino postula otro eje: la regulación de la especulación financiera con instrumentos y contratos de alimentos y otras materias primas.

En el país vecino la decisión de mantener elevadas tasas de interés para controlar la inflación redunda en un fuerte ingreso de capitales especulativos que presiona a la baja al tipo de cambio. Ese proceso erosiona la competitividad y la balanza comercial. En Argentina, el Gobierno tiene como objetivo preservar un tipo de cambio competitivo y el superávit comercial. A pesar de los distintos objetivos de política económica, los países de la Unasur comenzaron a diseñar distintas herramientas para enfrentar la crisis en forma conjunta. Los instrumentos van desde la creación de un Fondo Latinoamericano de Reservas hasta la promoción del comercio intrarregional en monedas locales.
(Mercedes Marco del Pont presidenta del Banco Central)

El gobierno kirchnerista que nació en 2003 es un emergente de la crisis política, social y económica de 2001. Surgió de un descalabro de proporciones y, por lo tanto, la intervención en emergencias es una marca de origen aún vigente. Por eso su experiencia de gestión en el espacio de la economía adquirió características de administración adaptativa. Frente a las crisis y diversos desafíos que irrumpieron en la escena local y que se siguen presentando, la orientación de las políticas para encararlos fue la más audaz, teniendo en cuenta la histórica relación de fuerzas existentes en el país. La renegociación de la deuda en default, la ruptura con el FMI, la política de estatizaciones, el fin de las AFJP, la Resolución 125 de derechos de exportación móviles, la Asignación Universal por Hijo, la utilización de reservas para pagar deuda, la estrategia defensiva del empleo y la actividad interna frente a la reciente crisis internacional. Todas esas medidas fueron estrategias adaptativas que intervinieron en el corto plazo involucrando en forma decisiva la construcción del largo.

(Diego Bossio director de ANSES)

Esta forma de intervención provoca irritación en los sectores conservadores que la califican como populista en forma despectiva, cuando es virtud. Pero también incomoda a quienes proponen lo mismo, pero hubieran preferido una previa explicitación formal de esas medidas como parte de un plan general.
                                              
                         (John Maynard Keynes)                              
                                                                                 
 Esta pretensión académica minimiza el desequilibrio de fuerzas en el terreno donde se expresan los intereses del poder económico. Además de desplazar lo que se conoce como la dinámica de lo impensado, como explicaba el maestro del periodismo deportivo Dante Panzeri el juego con una pelota de fútbol. Lo impredecible es un factor ineludible cuando se habla de política económica. Los partidarios de programas de largo plazo sugieren entonces que el de-safío ahora es lograr una mayor densidad de esas transformaciones para que no sean solamente medidas de emergencia, tomadas por una estrategia adaptativa, para que puedan institucionalizarse. Se convalidaría así el sendero de la construcción del largo plazo con medidas dispuestas en el corto. Pese a que se señala como carencia de la política oficial, el Gobierno ha realizado enunciaciones de aspiraciones que exceden lo coyuntural, que detalladas constituyen ese marco global reclamado.
  Para la economía argentina, mientras se preserven el mercado interno y el empleo y esa situación de inestabilidad externa no se traslade a los precios de las materias primas que exporta, el temor a la restricción externa se alejará del horizonte.

 
 (Guillermo Moreno Secretario de Comercio Interior)

 

 (notas completas aca y aca)

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